Organizado por la Federación Portuguesa de Cicloturismo y Usuarios
de la Bicicleta (FPCUB) y por "ConBici", el IX Congreso Ibérico "La
Bicicleta y la Ciudad" se celebró del 27 de abril al 1 de mayo en la
localidad de Murtosa (Portugal). El congreso "La Bicicleta y la
Ciudad" se celebra alternativamente en España y Portugal desde hace
18 años y es el congreso de referencia de la Península Ibérica en
lo referente a movilidad urbana en bicicleta y cicloturismo (la VIII
edición se celebró en Sevilla en 2010).
En la web http://www.murtosaciclavel.com/es/Congresso podéis encontrar amplia información sobre el Congreso, al que asisteron más de 200 personas entre usuarios, técnicos y políticos vinculados al mundo de la bicicleta. El Congreso contó con la presencia de los Sres. Secretarios de Estado de Transporte (Dr. Sérgio Monteiro) y de Administración Local (Dr. Paulo Júlio) de Portugal.
En la web http://www.murtosaciclavel.com/es/Congresso podéis encontrar amplia información sobre el Congreso, al que asisteron más de 200 personas entre usuarios, técnicos y políticos vinculados al mundo de la bicicleta. El Congreso contó con la presencia de los Sres. Secretarios de Estado de Transporte (Dr. Sérgio Monteiro) y de Administración Local (Dr. Paulo Júlio) de Portugal.
Las conclusiones oficiales
del Congreso (pronto disponibles en su web) destacan el
papel de la bicicleta como medio de movilidad sostenible, tanto
desde el punto de vista ecológico como desde el financiero. En estos
tiempos de crisis es esencial hacer ver a la Administración que la
inversión en infraestructuras ciclistas supone un ahorro mucho mayor
en otras infraestructuras de transporte mucho mas costosas. También
se reclamó una reforma del Reglamento de Circulación (en España y en
Portugal), que incorpore al mismo la bicicleta como un vehículo con
características específicas, cuyo uso debe ser potenciado mediante
medidas de discriminación positiva. Se reclamaron también medidas
que promuevan la intermodalidad bicicleta - transporte público. El
representante de ConBici reclamó en su intervención una "Ley de
Movilidad Sostenible" que promueva el transporte público, la
movilidad no motorizada (andando y en bicicleta) y una eficaz
intermodalidad entre estos modos.
Para CONBICI, la celebración de IXº Congreso Ibérico “A Bicicleta e a
Cidade” supone la constatación de que este evento, por su
trayectoria y experiencia, es y debe seguir siendo el verdadero y
auténtico foro donde usuarios y usuarias de la bicicleta podamos
debatir y compartir experiencias que proponga a la bicicletas como
medio de transporte y desarrollo sostenible en la Península Ibérica.
Nos hemos propuesto, junto a la Federaçao Portuguesa de Cicloturismo e Utilizadores da Bicicleta, trabajar aún más para que este foro siga siendo una referencia para las instituciones.
Las organizaciones miembros de CONBICI entendemos que sólo abordando la promoción de la bicicleta con una perspectiva integral e integradora, se pueden ofrecer verdaderas propuestas de avance.
El imprescindible desarrollo de la Ley de Movilidad Sostenible como herramienta para la ordenación jurídica de los transportes y sus infraestructuras, poniendo en valor la movilidad ciclista y peatonal, priorizando su promoción e implantación, debe ser una de las prioridades de la agenda política en España y Portugal, exigiendo desde CONBICI su urgente planteamiento.
En este mismo sentido, los ciclistas españoles necesitamos abandonar la percepción de inseguridad jurídica que supone circular por las calles de nuestras ciudades y pueblos. Planteamos por ello la urgente necesidad de que se actualice y reforme el Reglamento General de Circulación en vigor, dotándole de un apartado específico que reconozca el status de la bicicleta, eliminando la anacrónica obligatoriedad del casco en los tramos interurbanos que viene impuesta por la Ley de Seguridad Vial.
Desde CONBICI planteamos la necesidad de establecer un Código Técnico de la Edificación que incluya obligatoriamente aparcamientos en origen y destino de los desplazamientos, facilitando que los ciclistas puedan disponer de espacios seguros y accesibles donde guardar la bicicleta en zonas residenciales, terciarias y de trabajo.
Nos parece también prioritario abordar y rediseñar adecuadamente la movilidad en el entorno escolar. Promoviendo medidas como el calmado de tráfico cerca de los centros educativos, mejorar los caminos escolares y, tal vez lo más importante, desincentivar el uso del vehículo privado motorizado impidiendo o restringiendo el aparcamiento en las entradas y aparcamientos de los centros escolares. Todo esto debe ir acompañado de medidas de concienciación por parte del profesorado, las familias y las asociaciones de madres y padres.
La intermodalidad con los transportes públicos colectivos sigue siendo otro de los caballos de batalla de CONBICI. Las dificultades, impedimentos, arbitrariedad y los cambios de criterio, son a día de hoy una realidad que imponen las operadoras de transporte para imposibilitar la combinación de la bici con el tren, autobús, metro, tranvía, etc. Para ello seguimos exigiendo a la Administración Central del Estado una ordenación de la normativa (Ley de Movilidad Sostenible) que imponga a las operadoras la intermodalidad (principalmente RENFE).
Por último, nos parece importante dejar claro, en estos momentos de crisis social y económica, que la bicicleta por sus innumerables ventajas individuales y colectivas, debe y puede ser el instrumento que facilite el camino hacia un modelo de desarrollo desde parámetros sostenibles. Hacer partícipe a la ciudadanía de un modelo sostenible de movilidad con la bicicleta como una de sus protagonistas, no sólo nos hace pensar en un futuro sostenible, justo, equitativo, sino también en un futuro donde la felicidad, el bienestar y la comodidad que aporta la bicicleta, sean elementos motivadores para el cambio.
Nos hemos propuesto, junto a la Federaçao Portuguesa de Cicloturismo e Utilizadores da Bicicleta, trabajar aún más para que este foro siga siendo una referencia para las instituciones.
Las organizaciones miembros de CONBICI entendemos que sólo abordando la promoción de la bicicleta con una perspectiva integral e integradora, se pueden ofrecer verdaderas propuestas de avance.
El imprescindible desarrollo de la Ley de Movilidad Sostenible como herramienta para la ordenación jurídica de los transportes y sus infraestructuras, poniendo en valor la movilidad ciclista y peatonal, priorizando su promoción e implantación, debe ser una de las prioridades de la agenda política en España y Portugal, exigiendo desde CONBICI su urgente planteamiento.
En este mismo sentido, los ciclistas españoles necesitamos abandonar la percepción de inseguridad jurídica que supone circular por las calles de nuestras ciudades y pueblos. Planteamos por ello la urgente necesidad de que se actualice y reforme el Reglamento General de Circulación en vigor, dotándole de un apartado específico que reconozca el status de la bicicleta, eliminando la anacrónica obligatoriedad del casco en los tramos interurbanos que viene impuesta por la Ley de Seguridad Vial.
Desde CONBICI planteamos la necesidad de establecer un Código Técnico de la Edificación que incluya obligatoriamente aparcamientos en origen y destino de los desplazamientos, facilitando que los ciclistas puedan disponer de espacios seguros y accesibles donde guardar la bicicleta en zonas residenciales, terciarias y de trabajo.
Nos parece también prioritario abordar y rediseñar adecuadamente la movilidad en el entorno escolar. Promoviendo medidas como el calmado de tráfico cerca de los centros educativos, mejorar los caminos escolares y, tal vez lo más importante, desincentivar el uso del vehículo privado motorizado impidiendo o restringiendo el aparcamiento en las entradas y aparcamientos de los centros escolares. Todo esto debe ir acompañado de medidas de concienciación por parte del profesorado, las familias y las asociaciones de madres y padres.
La intermodalidad con los transportes públicos colectivos sigue siendo otro de los caballos de batalla de CONBICI. Las dificultades, impedimentos, arbitrariedad y los cambios de criterio, son a día de hoy una realidad que imponen las operadoras de transporte para imposibilitar la combinación de la bici con el tren, autobús, metro, tranvía, etc. Para ello seguimos exigiendo a la Administración Central del Estado una ordenación de la normativa (Ley de Movilidad Sostenible) que imponga a las operadoras la intermodalidad (principalmente RENFE).
Por último, nos parece importante dejar claro, en estos momentos de crisis social y económica, que la bicicleta por sus innumerables ventajas individuales y colectivas, debe y puede ser el instrumento que facilite el camino hacia un modelo de desarrollo desde parámetros sostenibles. Hacer partícipe a la ciudadanía de un modelo sostenible de movilidad con la bicicleta como una de sus protagonistas, no sólo nos hace pensar en un futuro sostenible, justo, equitativo, sino también en un futuro donde la felicidad, el bienestar y la comodidad que aporta la bicicleta, sean elementos motivadores para el cambio.
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